El Ojo de Zafiro

-Bueno....poca cosa realmente. Un dia me encargaron eliminar unos espantos que rondaban por las minas de esa gentuza. Acabe la mision, pero como recompensa obtuve 3 meses de cautiverio. Me obligaban a extraer minelares y metales valiosos.....con poca amabilidad

- No pueden ver una espalda en condiciones sin ponerla a trabajar, ¿eh? ¿Pensabas que harían lo mismo conmigo si yo hubiera aceptado su propuesta?

-No....me hubiesen puesto a trabajar a mi. Si ellos te tenian, me tenian a mi tambien. Sabian que te llevaba siguiendo un tiempo.

- Sabes perfectamente que no lo hubiera consentido.

-mmm....supongo que para evitar mas problemas me puse el estilete en el cuello. No ha nada como una entrada sorprendente para que se paren las cosas

- Estuvo a punto de darme algo, tienes razón. Pensé que estaba viendo un fantasma.

-Todo estaba pensado......supongo

- ¿Pensado? ¿Por quién? No pretenderías matarme del susto, ¿verdad?

-No, mi intencion era sacarte de alli....el problema venia si esos cazurros intentaban evitarlo

- Que se hubieran atrevido. Se hubiera hundido la montaña antes - sonreí -. Pero pobrecita Angy... En fin, si pensabas sacarme, ¿por qué esperaste tanto?

-Bueno.....no es tan facil....me encerraron. Al reves que tu, yo no tenia acceso ya que no me enfrente al Golem ese....entonces...pues....bueno, estuve en los calabozos. En cuanto me soltaron, te busque

- Ah, vale.

No sabía qué más decir. El nombre del Golem había hecho que un escalofrío me recorriera la espalda. No quería recordar aquello. Intenté despejarme con otra cosa.

- Oye... siento curiosidad por una cosa... um... ¿cuánto de rápido puedes correr? - fue lo primero que se me ocurrió, recordando la carrera que hicimos en Kenzerabierth para llegar al mar. Entonces me encontré retándolo a una carrera -. ¿Más que Minaresse? Mira que es un caballo elfo...

-Ja.....un caballo. Mientras mis pies esten en tierra, soy inbatible-puse mis manos en el suelo-a ver cuanto aguanta tu caballito-sali disparado dejando una estela de polvo. Corria a cuatro patas, pero solo lo sabia yo, por que apenas se me veia

- ¡Ey, eso es trampa!

Subí a Minäresse de inmediato y la yegua se puso inmediatamente al galope como una exhalación.

Podía mantener más o menos la distancia, pero sabía que no podría aguantar demasiado, aunque sentía el viento en la cara y se notaba la velocidad.

Bueno, si él había empezado antes, yo también podía hacer algunos truquitos. Con ayuda de la telequinesia no tardé en estar sólo unos metros por detrás. Entonces salté a su espalda y caímos juntos rodando por el suelo. Estiré la mano y toqué un árbol cercano.

- ¡Gané! - reí -. ¡Qué mal te ha sentado el entrenamiento en Torre Oscura, ¿eh? ¡Eres muy lento!

-Pfff.....lo que pasa es que tu eres una tramposa....tu caballo no puede aguantarme el ritmo sin tu ayuda-tome aire. Me incorpore, y la ayude a ella agarrandola de la mano....entonces note una perturbacion

- La culpa es tuya, por haber salido antes de tiempo. Si no, yo... - observé el cambio en su expresión. Me asusté enseguida -. ¿Qué pasa?

La empuje y la tire al suelo. Yo sali disparado hacia el lado opuesto. Una rafaga de aire cortante paso entre los dos, devastando el sitio en el que estabamos hacia un segundo.

"Ocultistas", fue lo primero que pensé.

Me incorporé, sacando las dos espadas de sus vainas y adoptando una posición defensiva. Lamentaba no haber recuperado todavía la totalidad de mis poderes y esperaba poder apañármelas conforme estaba.

Miré a mi alrededor para buscar a Vedrick y a nuestro agresor, pero el polvo todavía estaba en el aire y no se veía nada.

Oi un leve susurro detras de mi. Alli estaba. Se habia teleportado en mi espalda. Me susurro al oido
-Vedrick ¿Verdad?.....
-¿Que sucede?
-Digamos que te quiero acompañar
Sonrei.
-Nombre.
-mmm....primero quiero saber si eres digno de continuar la tarea...

Cuando el polvo se posó de nuevo en el suelo, distinguí perfectamente la silueta de otro ocultista detrás de Vedrick. Sin embargo, no parecía que fueran a enzarzarse en una lucha. Relajé los músculos y me acerqué a ellos, sin guardar las espadas, por si acaso.

-¿Crees que es necesario montar un numerito?
-Mmm....-note la sonrisa del extraño-me llamo Khandar Rys
-¿Desde cuando los ocultistas tienen apellidos?
-Desde que es tradicion en mi familia expulsar a las ovejas negras....
-¿eras una oveja negra desde tu nacimiento?
Otra sonrisa
-Me converti en Ocultista a los 20 años...pero eso en otro momento...como Ocultista de aire, exigo la pica de Ellhohin
-Muy bien.
Saque una pluma de color gris.
-Aqui la tienes, la longuirus de Ellhohin....-alargo el brazo para cojerla, pero no se la di-sin embargo, no puedo confiar en ti. Tendras que pasar un periodo de prueba. Vendras con nosotros.....Dalayn, acercate.

Me acerqué un poco más y extendí la mano al nuevo.

- Dalayn, Caminante nº 1, encantada.

El tipo me miró extrañado y puse los ojos en blanco.

- Está bien, jinete, pero ¿qué más da? Bienvenido al club.

Sonrio divertido una vez se le paso la sorpresa.

-Encantado, me llamo Khandar Rys

-Bien....necesito datos sobre ti, Khandar.

- Mi familia es del sur, de Sáyarot. Y ya os lo he dicho, soy la oveja negra de la familia - sonrió con amargura -. ¿Tu confidente? - preguntó, señalándome a mí.

Asenti.
-Prioritario protejer su vida. Si tienes confidente, tambien sera bienvenido.....o bienvenida