Ciudad de Rinnmain

-Nada, no tengo nada en tu contra- dije solamente.

Le coji su mano y la puse entre las mias con toda la ternura del mundo

-Ven, sientate - dije- que ha pasado??

No me senté me quedé de pie junto a él, con la mirada perdida.

-Val no eres tú... soy yo...- dije, y lo miré a los ojos- si me disculpas, quisiera ir a la calle a tomar el aire.

-Si claro - veia algo oscuro reflejado en sus ojos claros, se paro y la vi irse hacia el pasillo

Salí de la habitación, cerré la puerta y me quedé unos instantes apoyada en ella, con los ojos cerrados, después bajé abajo y salí a la calle, era de noche y no había mucha gente por las calles, estuve unas cuantas horas vagando por la ciudad, caminando sin saber a dónde.

Cuando ya llevaba muchas horas fuera sali a buscarla, ya me tenia preocupado, y no podia quedarme sentado sabiendo que ella estaba por ahi dandoles vueltas al coco, sali de la posada, y al rato la encontre debajo de un gran arbol, mirando hacia el cielo

-hola....-dije timidamente desde la distancia- me tenias preocupado y he venido a buscarte, ademas, queria hablar del tema

Me había sentado en un árbol en una plaza, de repente vi a Valeryon venir y sentarse junto a mí.

-No creo que le tema tenga mucho de que hablar- si tenía, claro que lo tenía... pero yo no quería...

La mire a los ojos, vi la afliccion en ellos

-Seguro?- dije yo- porque tus ojos no dicen eso, me dicen que hay mas, algo mas alla que no quieres decir por miedo, o por verguenza, no lo se, pero se que hay algo, no se como, pero lo veo

-No quiero hablar del tema...- dije, con la mirada perdida.

-Seguro que no? -dije- quiza si lo cuentas te quedarias mas agusto, no es bueno guardar esas cosas dentro para siempre, y no digo k lo chilles a los cuatro vientos, pero si a alguien de confianza, y desde luego, si es algo mio, no te lo calles

-Ya te he dicho que no tiene que ver contigo, además, siempre me ha gustado tener las cosas claras y en este momento no las tengo.

- Lo siento si te he impulsado a hacer algo que no querias, pero me preocupas, estoy viajando contigo hacia un horizonte que totalmente desconozco y me aterra, confianzo cada paso en ti, no puedo ir trankilo si se que puedes reaccionar de forma incomprensible en un momento dao, piensa que habra vces k tendremos que confiarnos la vida el uno en el otro, y que tengamos que anteponernos a los moviemientos del otro, no creo que hicieras eso con alguien en quien no confiaras

-Confío en ti mucho más de lo que he confiado en la gente que se ha habido en mi vida, pero no quiero confundir esa confianza con otras cosas en las que ni si quiera mi razón cree... -miré hacia el suelo, apenada...

Se puso a mirar hacia el suelo, yo le coji la barbilla con la mano y la hice que me mirara

-No tienes que decir nada que no quieras, pero me tienes preocupado, no ers el tipo de persona que se pone asi por una cosa cualquiera, y si lo stas pasando mal me gustaria ayudarte, llamame sopero o lo que quieras, pero haré algo que poca gente habra echo por ti, preocuparse

Entonces lo abracé, necesitaba aquel abrazo.

-Gracias- dije.

Le devolvi el abrazo

-Bueno... por nada del mundo me gustaria soltarte pero...-dije serio- que te parece si volvemos a la posada y dormimos algo antes de salir mañana?

-De acuerdo- volvimos a la posada, subimos a la habitación y nos acostamos, aquella noche no dormí nada...

Me desperte y vi que daenerys esta medio incorporada en la cama, me levante y me froté los ojos

-Nos has dormido verdad??- dije yo, temiendo la respuesta

-No, pero da igual- cambié de tema- ¿quieres que nos vayamos ya o que nos quedemos un día más?

-Mejor nos quedamos un dia mas que descanses - dije yo

-Eso no importa, lo digo para comprar provisiones ya que la mayoría no las pude teletranspotar y se quedaron con Xodryel.

-Vaya, es verdad- me levante y empezé a vestirme- hoy tenemos trabajo, yo kiero ver si me compro otra capa mas recia para el norte, ya empezará a hacer frio, me di la vuelta sin mirar, y daenerys venia en la direccion contraria, pero paremos justo a tiempo para parar el golpe, nuestras caras se quedaron muy cerca, y le dedique una sonrisa

Le devolví la sonrisa, ya que era raro verlo sonreir y me extrañó que lo hiciera después de lo de la noche anterior.

-Bueno, ¿vamos?

-si claro, vamos-dije y salimos a la calle, en busca de todo lo que nos hacia falta

La ciudad ebullía de actividad, la gente paseaba por las calles, o compraba en las tiendas, en la plaza principal, donde estuvimos la noche anterior, se había montado un mercadillo que parecía tener de todo, descubrí de repente que la gente nos miraba como si fuéramos extraños, bueno, en realidad lo éramos, pero no me importó, comenzamos a buscar las cosas que nos hacían falta.